La Universidad de Pinar del Río «Hermanos Saíz Montes de Oca» celebró hoy el Acto Central por el 50 aniversario de la enseñanza de la Preparación para la Defensa, un pilar formativo que ratifica el compromiso de la comunidad universitaria con la Revolución y la defensa de la Patria.
El acto, desarrollado en el marco de una gala político-cultural, constituyó un reconocimiento a la trayectoria de esta disciplina, integrada desde hace cinco décadas en el plan de estudios de la Educación Superior cubana, con el objetivo de formar profesionales integrales y listos para asumir cualquier tarea en favor de la nación.
Durante la ceremonia, se destacó que la Preparación para la Defensa es mucho más que una asignatura: es símbolo de la unidad, la resistencia y el espíritu inquebrantable del pueblo cubano, valores que se inculcan en las nuevas generaciones desde las aulas.
Un momento central de la velada fue el emotivo homenaje a los profesores que han dedicado una parte significativa de su vida a la impartición de esta materia. Fueron reconocidos de manera especial educadores con más de 30, 25, 20, 15 y 10 años de servicio, cuya entrega ha sido fundamental para consolidar este componente en la formación de miles de egresados de la casa de altos estudios pinareña.
Las autoridades universitarias y representantes de las FAR presentes en el acto entregaron distinciones a estos docentes, subrayando su ejemplaridad, consagración y el legado que transmiten a los estudiantes, formándolos no solo en la técnica, sino también en los principios éticos y patrióticos.
El rector de la Universidad, Yorki Mayor Hernandez, enfatizó que «la defensa de la Patria es el primer deber de todo ciudadano, y esta universidad, fiel a su historia y a los nombres de los hermanos Saíz Montes de Oca que lleva, cumple con esa misión formando a sus estudiantes en la conciencia y la capacidad necesarias para ello».
La conmemoración reafirmó que, tras medio siglo, la enseñanza de la Preparación para la Defensa se mantiene como un espacio vital para fortalecer la convicción revolucionaria y la disposición combativa de la Universidad de Pinar del Río, reafirmando su condición de trinchera de ideas y baluarte de la sociedad cubana.
