Por Edenia Abreu Hernández
Recientemente el Movimiento Juvenil Martiano reconoció con el Premio Ismaelillo a varios jóvenes destacados en la investigación y promoción de la vida y obra de nuestro Apóstol Nacional José Martí, entre ellos, se encuentra Carlos Ariel Abreu Cordero.
Este joven, a quien reconozco por su entrega en cuerpo y alma a la vida universitaria a través de su quehacer como miembro de la Federación Estudiantil Universitaria de nuestra Casa de Altos Estudios, es también un amante y fiel defensor de la obra martiana.
“Desde los primeros años en la Universidad los profesores me incitaron a participar en actividades extensionistas e investigativas sobre la obra de José Martí, y una vez me inmiscuí bien en el asunto ya no pude desprenderme. Me atrapó la emoción de las Marchas de las Antorchas cada 27 de enero, los mítines relámpago, las galas culturales y los fragmentos de poemarios martianos que declamaba en los Festivales de Artistas Aficionados”.
“En cuanto a materia investigativa he tenido la oportunidad de conocer todas las aristas del pensamiento martiano. Mi asociación a la Cátedra Martiana de la Universidad me ha llevado a participar en coloquios, talleres y eventos en los que he presentado variados aspectos sobre la incidencia del pensamiento del Apóstol en la educación cubana actual”.
Aun en tiempos de pandemia y a las puertas del cierre de su carrera universitaria Carlos Ariel no recesa en sus funciones. En plena faena como voluntario dentro de la Zona Roja del Hospital de Campaña situado en la Sede Rafael María de Mendive fue informado del merecido reconocimiento que fue le otorgado.
“Me tomó por sorpresa todo, porque ni siquiera tenía conocimiento de que se entregaba un premio por una labor que desarrollo por puro placer. Realmente me alegró muchísimo la noticia y más aún en el momento en que la recibí. A pesar de que no pude estar presente en el acto de entrega del premio porque estaba en aislamiento, hoy siento un compromiso mayor de seguir contribuyendo al estudio y promoción de la obra de nuestro Héroe Nacional”
En su formación como psicopedagogo, asegura Carlos Ariel, las ideas martianas están presenten en todo momento y lo comprometen para contribuir a la futura educación de sus educandos. En tal sentido, aprovecha para invitar a los jóvenes de la comunidad universitaria a sumarse en el estudio de la obra del más universal de los cubanos.
“A los jóvenes les pido que no se conformen con lo que les lleva el profesor a través de conferencias u otros materiales. La vida y obra martiana nos espera, indaguemos más a fondo sobre su pensamiento y hagamos que de nuestro corazón salga con luz propia ese Martí que siempre llevamos dentro”.