Por Edenia Abreu Hernández
Dicen que a la tercera va la vencida, pero Annet Duarte Rodríguez no entiende de eso. Cinco es el número de veces que la joven estudiante del tercer año de Licenciatura en Educación Primaria ha entrado a trabajar en Hospitales de Campaña ubicados en nuestra Casa de Altos Estudios.
“La primera vez que decidí incorporarme a los equipos de trabajo para la Zona Roja sabía que la tarea no sería nada fácil por lo complejo de la situación epidemiológica de la provincia, pero aun así no desistí, pues comprendí que mi apoyo sería necesario en los momentos difíciles de rebrote en los que nos encontramos una y otra vez”.
La joven, quien se prepara profesionalmente para educar a los más pequeños de casa, recuerda con especial cariño los pequeños momentos que se disfrutan con los niños que se encuentran ingresados en los Centros de Aislamiento, y que también le aporta mucho a su preparación como docente.
“Ver la cantidad de niños ingesados en esos sitios es muy difícil y siempre me veía reflejada en cada madre y cada padre que estaban pasando por momentos de angustia, pero la inocencia de los niños y sus sonrisas cuando uno llega a limpiar o a alcanzar algún paquete cambia todo. Nunca olvidaré que en esta última estancia de trabajo, había una niña de tres añitos que siempre que llegabamos al cuarto nos cantaba una canción, esos son detalles que te alegran el día”.
Además de los buenos amigos que ha conocido en los equipos de trabajo y los reuerdos especiales, reconoce Annet que el trabajo allí es inagotable y muy tenso, porque todo cuanto se hace requiere de muchos cuidados con los protocolos de bioseguridad establecidos, para evitar contagios entre el grupo de voluntarios.
Pero aun así, y a pesar de la distancia que la separa por esos días de su natal Herradura, cuando le preguntan por una vez más como voluntaria universitaria, enseguida responde con un “sí” estremecedor pues asegura que estar en una Zona Roja es una experiencia única.
Siempre orgulloso de ser tu hermano y sobre todo porque se, que todas estas tareas las has enfrentado con total responsabilidad… así entras y sales una y otra vez de esta zona roja que más que dolores te ha proporcionado experiencias y múltiples momentos de alegría que quedan para siempre. Nuestro país necesita hoy y mañana a todos sus «pinos nuevos» y sobre todo de esos que como tu estarán en cualquier instante dispuestos a dar su paso al frente! «Hasta la Victoria Siempre » Te amo!