Por Analeida Puerto Iglesias
31 de diciembre, último día del año y momento propicio para celebrar la vida y la salud después de un 2020 muy difícil, marcado por la presencia de una terrible pandemia.
31 de diciembre y algunos miembros de la comunidad de la Universidad de Pinar del Río “Hermanos Saíz Montes de Oca” permanecen apoyando al personal de Salud Pública en la Zona Roja del Hospital de Campaña de la Sede “Rafael María de Mendive”.
Javier Alejandro Carmona Sariol y Pedro Samuel Hernández Jiménez, estudiantes de tercer de Licenciatura en Educación. Química y de cuarto año de la Licenciatura Educación. Biología, respectivamente, de la Facultad de Educación Media; y Roy Luis Ortega Valdés, adiestrado de Cultura Física, decidieron este año estar donde son más útiles, aun cuando sean días festivos y la familia reclame su presencia.
Estos tres valientes jóvenes universitarios decidieron dar el paso al frente porque “es aquí donde nos necesitan. El país nos necesitaba y las personas afectadas en Pinar del Río por esta pandemia también”, expresa sin vacilar Javier Alejandro Carmona Sariol.
Por su parte, Pedro Samuel Hernández Jiménez comenta:
“Yo nunca he pasado un 31 de diciembre sin mi familia; pero en esta ocasión tendrá que ser así porque es por una causa justa. Tengo el apoyo de mi familia que es todo lo que se necesita cuando se toma la decisión de estar aquí en esta tarea o en cualquier otra, la cual requiera el apoyo de los jóvenes universitarios.”
Pedro Samuel Hernández Jiménez expresa que “como joven d esta generación di el paso al frente. Decidí entrar por segunda ocasión a colaborar en la Zona Roja y lo repetiría cuantas veces fuera necesaria porque como ha dicho nuestro Presidente Díaz-Canel Bermúdez la confianza está en la juventud y nosotros nos sentimos muy orgullosos de cumplir con esta ardua tarea.”
Mientras, Roy Luis Ortega Valdés afirma:
“Mi familia está muy orgullosa de mi, de ver mi disposición de luchar contra la Covid-19 porque al final cualquier día es excelente para estar en su compañía. Sabemos que los 24 de diciembre y los fines de año se pasa en familia, pero decidí estar aquí porque la Revolución me necesitaba. Y aquí pasaremos el fin de año, celebrando cada día que un paciente salga de este hospital porque es un triunfo de nuestro sistema d salud y de la Revolución”.
“También me llevo muchas cosas positivas de estar en este tipo de centro: el buen trato del personal médico y de los mismos pacientes; la preocupación del Rector y del Vicerrector de la UPR, quienes siempre están pendientes de nosotros y de nuestra labor en el hospital de campaña y el cariño que nos ha ofrecido todos los trabajadores de la Universidad”.
Con jóvenes como estos podemos estar seguros que el futuro es mucho mejor. Una vez más por su valentía y su ejemplo.