Por Edenia Abreu Hernández
El 31 de marzo de 1959, apenas tres meses después de la victoria popular, el Gobierno Revolucionario fundó, mediante la Ley 187, la Imprenta Nacional de Cuba. Con ello se establecían las bases para la publicación masiva de libros, folletos y revistas.
Como homenaje a este trascendental acontecimiento, desde el año 1981 se celebra en el país el Día del Libro Cubano, oportunidad especial para presentar nuevas obras y rescatar aquellas de alta demanda popular.
Desde el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI) de nuestra Casa de Altos Estudios se conmemora la significativa jornada a través de las bibliotecas, las cuales, mediante redes sociales y medios digitales como los Blogs, promocionan su trabajo, comparten información sobre el quehacer bibliotecario a nivel nacional e internacional y facilitan informaciones a los usuarios para las búsquedas pertinentes que necesiten hacer.
Para fomentar la lectura entre los jóvenes universitarios las bibliotecas del CRAI asumen la promoción de interesantes artículos sobre efemérides literarias, personalidades de la historia y la cultura cubana y pinareña, bibliotecología y buenas prácticas, entre otros temas. Pero no solo se comunica este tipo de información, también se muestran las obras de escritores nacionales e internacionales, muchas de las cuales se encuentran en los fondos de la biblioteca.
Con la expansión de la Covid-19 en la provincia nuevas retos ocupan por estos tiempos el quehacer de los profesionales del sector. Hoy las bibliotecas universitarias enfrentan nuevos desafíos en su gestión, condicionadas sobre todo por los cambios experimentados en el sistema de la Educación Superior, que necesitan novedosas formas de enseñanza y aprendizaje. Ante ello se demanda el papel activo y de acompañamiento de las bibliotecas durante el desarrollo de los procesos docentes, asistenciales e investigativos.
En este contexto, se requiere adecuar los métodos y estilos de trabajo de las bibliotecas, las que durante siglos han contribuido a la educación y a la formación de nuevos conocimientos entre los universitarios. Es por ello que, aun en tiempos de pandemia, el centro continúa la gestión de contenidos en sus habituales servicios de apoyo a la docencia y la investigación como la Biblioteca Digital (e-archivos), el Repositorio Institucional (ALMA), las revistas científicas y el catálogo de libros, entre otros.
Según informó la MS. c Yusnelys Collazo Martínez, subdirectora del CRAI, para garantizar la consecución de los servicios que oferta el centro a su comunidad de usuarios y mantener la colaboración en los procesos de gestión del conocimiento en la UPR durante el complejo periodo de transmisión de la Covid, la biblioteca habilitó nuevos horarios de servicio, sus miembros han participado en eventos online para renovar y enriquecer los medios de trabajo y se ocupan de la creación de nuevos contenidos para captar la atención de sus usuarios tanto dentro como fuera de la Universidad.