Por: Juan Alberto Blanco Rivero
Blanca Margarita Ungo Carrasco
“La felicidad no es lo que nos pasa, sino como interpretamos lo que nos pasa”.
Marian Rojas Estape
El tema de la felicidad ha sido deformado por el efecto irresistible de las industrias y su desarrollo en las últimas décadas, orientado desde y en función de la automatización primero y luego de la digitalización. Todo ello ha convertido a la felicidad más que en un ideal del disfrute en un castigo por su fuerza excluyente porque: ”si no eres feliz, no eres nadie en esta vida, no cumplirás tus metas y serás un ser marginal”[1]
En cualquier época de desarrollo de la humanidad, han existido diferentes maneras de entender la felicidad, condicionados por las problemáticas existenciales referidas en mayor o menor medida por las plataformas ideológicas dominantes que sustentan la cultura de diferentes grupos sociales.
La nuestra, la de un mundo post pandémico, es un época de crisis global y nacional, demanda con urgencia el estudio de la felicidad. Sin embargo, en la conciencia cotidiana se pueden apreciar ciertas representaciones que dificultan su estudio[2] .
En muchas personas se manifiesta la idea de la felicidad como estado en el que no ocurre nada contario a las pretensiones individuales, nada negativo, por lo que no es realizable, solo existen momentos felices, de lo que se concluye su naturaleza utópica, una especie de ideal irrealizable, que niega la pertinencia de su estudio científico.
En investigaciones sobre los jóvenes, se destacan procesos relacionados con acceso al trabajo y la precariedad del empleo, el abandono de los estudios, las dinámicas familiares conflictivas, la migración y otros en los que los efectos de la crisis son notorios, desde el punto de vista existencial ¿pudiéramos considerarlos como manifestaciones contrarias a la felicidad? En el análisis que realizan los jóvenes sobre estas problemáticas, en el ambiente universitario se manifiesta, con cierta prevalencia la incertidumbre, la desesperanza, y en ocasiones el pesimismo
Existe la opinión de que no necesariamente “La felicidad aumenta el hedonismo y el egoísmo de la juventud”, y por consiguiente la felicidad puede que incluya el disfrute o el goce.
[1] Javaloy, Federico & otros. (2007)Bienestar y Felicidad de la juventud española. https://www.injuve.es › sites › default › files › estu…?
[2] Javaloy, Federico & otros. (2007)Bienestar y Felicidad de la juventud española. https://www.injuve.es › sites › default › files › estu
La felicidad es también una decisión, que implica constancia y trabajo, pues las metas no se alcanzan sin esfuerzo.
De todas las formas que hay para ser feliz, pienso que una de las más importantes es tener salud, la individual y la familiar, con eso se puede lograr lo demás.
Las representaciones sobre la felicidad varían, aunque en el mundo industrializado se ha generalizado la idea de asociarla con las posesiones, es decir mientras más se tiene, más feliz se es. Pero… realmente será eso la felicidad. Este escrito nos invita a pensar en el verdadero sentido de la felicidad y como alcanzarla.