Abel Prieto Jiménez, presidente de la Casa de las Américas, intercambió con estudiantes y profesores de la Universidad de Pinar del Río “Hermanos Saíz Montes de Oca” sobre temas relacionados con la colonización cultural en los tiempos actuales y cómo contrarrestar la hegemonía cultural imperante en el mundo.
En el Salón de los Consejos de la sede Hermanos Saíz, el intelectual cubano destacó que resulta increíble cómo el poder colonial utiliza a la cultura como instrumento de infiltración en defensa de la Humanidad.
El también diputado a la Asamblea Nacional señaló que vivimos una crisis cultural, donde poderosas corporaciones controlan el mercado del arte y la literatura, degradan las creaciones a mercancías y cada vez quieren que seamos más frívolos. “La promoción de lo superficial, la tontería es un fenómeno grave”.
En ese orden recordó al teólogo brasileño Frei Betto quien habla de una globocolonización que reproduce, a veces de forma inconsciente, los paradigmas y símbolos de Estados Unidos en todos los países del mundo, por medio de la dominación e influencia en los grandes emporios de la comunicación en poder del imperialismo.
“Betto, señaló que el gran triunfo cultural del capitalismo es lograr que los pobres se sientan culpables de su pobreza. Esto también se ve en Cuba donde hay personas que piensan que la única salida es el capitalismo, jóvenes que piensan que su futuro es sólo fuera de su país. La forma de dominación por la vía cultural; de promover las historias de los artistas, de los multimillonarios, del modo y estilo de vida como modelo de éxito”, destacó.
Ante el cuestionamiento de ¿qué podemos hacer para lograr frenar la colonización cultural?, afirmó que es indispensable «la coherencia entre las organizaciones y organismos en la nación; además, el Apóstol de la independencia cubana y el Comandante en Jefe constituyen los dos ejes imprescindibles en el pensamiento descolonizador del archipiélago”, enfatizó.
Abel Prieto Jiménez llamó a sistematizar encuentros y talleres con el estudiantado, donde la historia se entremezcle de forma armónica y sin prohibiciones para abordar cualquier tema. “Crear una cultura crítica que les permita a las personas discernir sobre lo que consumen”, recalcó.
En el encuentro, profesores, estudiantes e intelectuales pinareños presentes en el debate, expresaron sus criterios sobre el tema y expusieron algunas de sus experiencias y sugerencias para mostrar la verdadera cultura nacional, local y los valores que nos identifican como nación.